Siempre me gusta explicar mis inquietudes con conceptos que todo el mundo comprenda.
En este mi segundo artículo, voy a intentar explicar mi idea, con las vacas.
Sí sí las vacas, creo que todos sabemos algo de ellas, como poco las habremos visto por la televisión, y algunos que hayan estudiado biología o veterinaria sabrán algo más.
Dentro de un sistema, yo soy de los que pienso que las vacas (empresas) son las que lo nutren, sea en un pasto grande (país) o en pastos más pequeños (pueblos). Las vacas, si se cuidan bien, dan mucho rendimiento, durante toda su vida. De ella nos nutrimos todos, los dueños ( accionistas), los pastores que las cuidan ( trabajadores), los parásitos (este concepto que cada uno lo dilucide, pero creo que está claro, los que siempre van a la mierda y nos llevan a los demás). Si nuestro campo (sistema) es capaz de generar buenos pastos, de los que las vacas se alimenten bien, darán mejor leche (salarios, derechos laborales, impuestos), y más, si se les cuida, si se les dan mimos, si se les da vitaminas (apoyo por parte de las instituciones, subvenciones, éstas últimas deberían ser solamente en sectores estratégicos). De ellas nos alimentaremos todos, obtendremos buenos alimentos y todos viviremos mejor. Y cuando ya esté muy vieja y no de más leche, siempre la podremos utilizar para carne (activos).Si además ese pasto o campo tiene unas vallas bajas, o incluso no haya vallas (liberalismo), hará que puedan entrar toros (inversores) de otros campos, o incluso si existen toros en nuestro pasto, estos podrán andar y pasear libremente por el campo, y pasar un buen rato con nuestras vacas, que con el tiempo y con mucho mimo generaran terneros (emprendedores) y estos algunos nos los comeremos pronto porque son más tiernos, y otros se harán grandes, algunos de ellos en el futuro serán vacas y otros serán buenos toros.
En nuestro campo (España) durante unos años no paramos de generar exquisitas vacas y excelentes toros de diferentes razas (Santander, BBVA, Movistar, Inditex, Repsol, Iberdrola, Sacyr, Martinsa Fadesa, Fcc, Dragados....), luego vinieron unos parásitos (2004) por un desastre biológico, que quisieron fomentar mayor producción de nuestras vacas, quemando a marchas forzadas el modelo que nos había colocado en un lugar en el mundo de las vacas, incluso en las mejores escuelas de negocios del mundo ( Harvard, Standford...) estudiaban a nuestras vacas. En el 2007 sufrimos la enfermedad de las vacas locas ( boom de la construcción), esto fue una ruina para nuestros toros y nuestras vacas, los toros de otros pastos huyeron lo más rápido posible y nuestras vacas sin ya toros con los que pasarlo bien se fueron muriendo o adelgazando hasta tal punto que ya no generaban leche. Como el problema era tan acuciante y nadie tomaba medidas, llego Sanidad (Alemania-Merkel) y ordenó poner medidas para sacrificar muchas de ellas para evitar males mayores. Algunos no quisieron ver este hecho como una limpieza de nuestra cabaña bovina enferma ( tejido empresarial basado en el humo), y pensaron que eran ataques a nuestras vacas para exterminar una raza (ataques especulativos), seguían sin ver la realidad. Después de 7 años, cada día estamos peor, nuestras vacas, cada día menos ( este trimestre un 6% más que el año pasado de concurso de acreedores), ya no dan leche, están muy delgadas, nuestros terneros están saltando las vallas, que por el sur son muy bajas y entran pastores en búsqueda de vacas de mejor raza, y las del norte cada vez más altas, por lo que nuestros terneros tienen que ser muy buenos, estar bien formados, para poder saltar en búsqueda de pastos mejores. Mientras tanto nuestros parásitos, siguen exprimiendo a nuestras vacas, algunas de ellas en fase terminal, pero no conciben una vida sin vacas, porque piensan que si estas se nos mueren, vendrán otras, pero no se dan cuenta de que para ello, hace falta toros, que vacas delgadas entre más vacas, por mucho que se den cariño, seguirán siendo solo vacas. Que nos hacen falta toros, y pastores que cuiden bien de nuestras vacas, y buenos pastos para que se alimenten, porque sino no tendremos leche, y sin leche, solo nos quedará algo de hierba en los pastos (algunos parásitos, se conforman con eso y con la vida de colores, pero eso sí quieren de vez en cuando aunque sea, comerse un buen filete de ternera). Y así estamos, esperando a que se nos mueran las vacas, dejando pasar el tiempo a ver si viene algún toro de esos de raza árabe o de raza rusa o china, sin darnos cuenta que ya no quieren venir, que hay muchos pastos mejores que el nuestro, y que hasta hace poco nuestro pasto era el octavo y que ahora ya es el duodécimo, y que ya no viene nadie, que los que vienen solo vienen a terminar de liquidar nuestras vacas, llevándose los pocos genes buenos que quedan, y si ya nos quedamos sin la genética, no sé que quedará de nuestra querida idiosincrasia. Mientras tanto los vividores de la pradera, siguen alimentando la “confianza” de nuestros pastores, con el fin de seguir chupando la poca leche que dan las vacas, diciendo que a finales de 2009 ya veían brotes verdes, que yo en estos pastos no los he visto, pero en otros sí y muchos. Pero nuestros pastores no son tontos y ya ven que mucho talante pero vamos a llegar a 5 millones de pastores, sin vacas y por lo tanto sin trabajo.
En mi vida de vaquero he conocido muchas vacas, algunas de ellas muy buenas, de raza española, y están sobreviviendo porque están saltando a otros pastos, y porque coquetean con buenos toros, y son cuidadas por buenos pastores, pero además porque durante la enfermedad de las vacas locas, no se metieron en los pastos que les hacían crecer artificialmente, sino que siguieron alimentándose de una manera sana, y sin querer producir más de lo que tenían que producir, y eso sí supieron hacer ejercicio, y ponerse en forma, lo que ahora les está permitiendo poder saltar grandes vallas, vallas muy altas, para de vez en cuando volver a nuestros pastos, y dejarnos algo de leche, pero eso no es suficiente, tenemos que fomentar entre todos tener buenas vacas aquí también, sobretodo en los pastos más pequeños.
Estoy convencido de que si esta vez dejamos a los parásitos a un lado, y les damos una oportunidad a los vaqueros que saben cuidar de las vacas, (ya lo demostraron en el 96), podremos restaurar nuestra genética, esa que a mí me gusta tanto, que saca lo mejor de nosotros, y que hace que vengan pastores y vaqueros de otros campos para ver como sabemos cuidar a nuestras vacas, para que den excelente leche y haga que cada día vivamos mejor y seamos más felices. Esa genética, que hace que nuestras vacas vistan al 54% de la población (Inditex, Mango, Adolfo Dominguez…..), calcen al 75% de la población (Jaime Mascaró, Pons Quinta, Geox….), esas que educan y divierten a los hijos de nuestros pastores (Imaginarium), esa que haga que cuando nuestros terneros ganan la copa del mundo de terneros futboleros, nos haga gritar de emoción " yo soy español, español...." esa que cuando ganan nuestros terneros tenistas, nos emocione al decir "vamos..." esa que hace que nuestros pastores, beban la suficiente leche, como para por ellos mismos viajar a otros pastos, para ver mundo y traer ideas para mejorar nuestro campo, nuestros pastos y nuestras vacas, esa que haga que día a día entre todos creemos Un Mundo Mejor.
Esto debería ser en este campo desde el que escribo (España), y en todos los demás, todos los campos, todas las vacas, los pastores, los terneros, los dueños, trabajando por Un Mundo Mejor.
Un vaquero-pastor de Sabiñánigo
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